
Los muertos se elevaron a seis y hay por lo menos once desaparecidos. Búsqueda continúa.
Lo único que recuerdan los habitantes de las veredas Villa del Prado, Remolinos y Versalles, de Isnos (Huila) es que en medio de la madrugada escucharon un rugido de la tierra que los obligó a huir de sus casas para salvar sus vidas.
En cuestión de minutos la furia de la naturaleza convirtió lo que eran huertas, parcelas y casas en un cúmulo de piedras, arena y lodo. Ayer, los rescatistas encontraron los cuerpos de dos personas que hacían parte de las once declaradas como desaparecidas.
"Escuché el estruendo de la quebrada, grité lo más que pude y corrí, pero cuando llegué encontré todo totalmente destruido", asegura Fernando Chicangana , quien perdió a cinco de sus familiares.
El párroco de Isnos, José Ómar Collazos , no pudo ocultar su dolor al asegurar que las tres veredas azotadas por la quebrada La Chorrera convirtieron a la población en un pequeño Armero. "Es un panorama desolador, con grandes tierras movidas, piedras gigantes. Sólo quedan ruinas".
Pero en medio del dolor también se oyeron las voces de algunos de los afectados quienes señalaron que no se actuó a tiempo porque hacía varios días La Chorrera estaba represada.
A ellos se unió Sergio Younes , presidente de la Asamblea del Huila, quien aseguró que "lo único que el tiempo no perdona es lo que a tiempo no se hace. Este drama estaba anunciado. Lamento que si la Chorrera llevaba ya represada algunos días ninguna autoridad hubiese tomado las medidas necesarias para evitar esta tragedia que era previsible".
Una búsqueda difícil
El invierno que azota al sur del departamento dificultó el sábado en la tarde el rescate de las víctimas.
Ayer a las 5 a. m. los cerca de 100 miembros de la Cruz Roja, la Defensa Civil, los bomberos de Isnos y Pitalito, que contaron con el apoyo del Ejército y la Policía, retomaron la búsqueda de los desaparecidos y atención a las 33 familias (103 personas) que lo perdieron todo en la emergencia.
"Quedamos en la calle, la avalancha nos dejó sin nada y lo peor, nos quitó a nuestra mamita. (...) Ella quedó inconsciente, reaccionamos entre el lodo y a mi mamita la avalancha se la llevó hasta el Magdalena y fue rescatada sin vida en la vereda Versalles de Pitalito", lamentó Mauro Garzón , hijo de Julia Pialejo.
¿QUÉ SIGUE?
EL INVIERNO SEGUIRÁ FUERTE EN EL SUR DEL HUILA Y PODRÍA HABER MÁS CRECIENTES
Mientras en el norte del Departamento del Huila sufren por la sequía y cientos de reses han muerto por falta de agua y comida, en el sur el invierno es inclemente. Según el Ideam, hay alerta naranja por posibles crecientes súbitas en la parte alta del río Magdalena en las poblaciones de Isnos y Pitalito.
Isabel Hernández, coordinadora del Comité Departamental de Emergencias, pidió a las personas que no tuvieran familiares entre las víctimas alejarse de la zona del desastre debido al riesgo por la continua caída de piedras. A la zona se desplazó maquinaria para remover escombros.
EN DEFINITIVALuego de la creciente de la quebrada La Chorrera, en Isnos, en la que perdieron la vida seis personas y 11 más continúan desaparecidas, se denunció que había un represamiento de agua que no fue atendido a tiempo.