
La cifra de sancionados por embriaguez, hasta ayer, es la más alta del año. Sin embargo, van menos que en 2011.
A pesar de que la Cámara de Representantes ya aprobó la ley que sanciona el primer grado de embriaguez con suspensión de licencia y multa y obliga a los conductores a someterse a la prueba de alcoholemia, este fin de semana fue en el que más se detectaron borrachos manejando en Medellín.
En 1.788 pruebas los guardas de tránsito sancionaron a 110 ciudadanos con multa de 850.050 pesos. Sin embargo, en lo que va corrido del año la tendencia de la infracción es a la baja. De acuerdo con datos de la Secretaría de Tránsito y Transportes, en 2012 van 1.083 positivos, mientras que en el mismo periodo de 2011 fueron sorprendidas 1.400 personas conduciendo bajo los efectos del licor.
Carlos Alberto Marín Marín, subsecretario de Control del Tránsito, explicó que el aumento del indicador este fin de semana del Día del Padre se debió, principalmente, al megaoperativo que, en la noche del viernes, hicieron 50 guardas, seis médicos, 30 agentes de la Policía, 10 expertos del laboratorio de toxicología del Tránsito y 45 gestores pedagógicos, con el acompañamiento del Fondo de Prevención Vial.
La Defensoría de Espacio Público y la Secretaría de Obras Públicas apoyaron la logística del plan de control que se ejecutó entre las 9:00 p.m. del viernes y las 5:00 a.m. del sábado en cinco glorietas: La Aguacatala, San Diego, Bulerías, avenida del Ferrocarril con San Juan y Punto Cero.
En el operativo las autoridades revisaron 1.804 vehículos, inmovilizaron 149 y emitieron 292 comparendos por diferentes infracciones.
Aplicaron 1.119 pruebas de embriaguez, de las que salieron positivos 79 conductores. Sus vehículos, 47 carros y 32 motos, fueron inmovilizados.
El coronel Fabio Rodríguez , comandante (e) de Seguridad Ciudadana de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, calificó la acción conjunta como la más contundente del año.
Por su parte, Daniel Correa, conductor de automóvil, dijo que le parecen excelentes estos retenes, pero consideró exagerada la sanción a personas que se hayan tomado una o dos copas.
Se siguen negando
Al parecer, solo cuando el presidente Juan Manuel Santos sancione la nueva ley, los borrachitos dejarán de ponerle trabas al examen de alcoholemia.
El subsecretario Marín contó que en San Juan vio un hombre "que no quería parar y estaba tan borracho que ni se tenía cuando se bajó del carro".
Cuando los ciudadanos se niegan a soplar en el alcoholímetro, son fundamentales los médicos que, tras analizar aspectos físicos, emiten diagnósticos irrefutables para los infractores.
En La Aguacatala un señor soplaba mal, por lo que tuvo que intervenir el toxicólogo, que determinó que el hombre estaba ebrio.
PARA SABER MÁS
OTROS MUNICIPIOS TAMBIÉN ACTUARON
Las administraciones de Envigado, Itagüí, Sabaneta y Caldas se vincularon a la jornada e hicieron revisiones especiales en sus jurisdicciones. En Envigado los guardas expidieron 164 comparendos, inmovilizaron 14 vehículos y detectaron cuatro conductores embriagados. En Itagüí, entretanto, los agentes emitieron 125 comparendos e inmovilizaron nueve vehículos por diferentes infracciones. No dieron con ningún ebrio al volante. En Sabaneta y Caldas no se reportaron novedades.
Carlos Marín, del Tránsito de Medellín, invitó a que, cuando el plan sea de rumba, se use transporte público o se elija otro conductor.