En la mañana de este viernes avanza la sustentación de apelación del fallo proferido por la Procuraduría en contra del exalcalde de Medellín, Alonso Salazar Jaramillo, que lo inhabilitó por 12 años para ejercer cargos públicos.
Luis Alfonso Cadavid, apoderado de Salazar, argumentó en su intervención que el "fallo es manifiestamente desafortunado".
Consideró que el procedimiento empleado para el proceso no fue el correcto. "Cuando a usted le llegó la denuncia lo primero que usted hizo fue decretar prueba de oficio, si la decretó es porque no habían los elementos suficientes para definir la prueba procesal".
Y por eso consideró que tampoco un análisis riguroso de las pruebas adjuntadas.
Así mismo, reiteró que tuvo un tiempo mínimo para la preparación de su sustentación.
Recordó que el alcalde tiene como función policiva actuar para proteger el orden público y así lo hizo. "Estamos hablando de democracia y no solo basada en la transparencia sino también en la libertad de los ciudadanos", agregó el abogado.
También precisó que si bien la ciudad no vive un período violento como el de la década de los noventa, dijo que tantos años después "hay agentes criminales con la potencia todavía de influir los procesos electorales".
El pasado miércoles, la procuradora María Eugenia Carreño advirtió a la defensa que la sustentación no tendrá pronunciamiento alguno por parte del organismo, de ninguno de los argumentos que se exponganen el recurso de apelación.